Los hechos tuvieron lugar los primeros minutos de la madrugada del lunes 4 de enero de 1960, el escenario de la tragedia pasional fue en la colonia Cuauhtémoc. Los celos y el dinero fueron, en apariencia, los móviles del homicidio.

Otilia Lazcano argumentó, en medio de un mar de lágrimas, que actuó en legítima defensa y que todo se debió a un momento de ofuscación, producido por la pésima vida que le daba Claudio.

Desde hacía 90 días, aproximadamente, se encontraban separados y él sólo iba a visitar a sus hijas. Otilia puso fin a la discusión tomando el puñal que estaba en la mesa de centro y clavándolo en el corazón de su esposo, quien no murió instantáneamente sino media hora después en el hospital de la Cruz Roja.

Puedes conocer más de este y otros casos en los Archivos secretos de La Prensa.

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