Después de asimilar los efectos de su reciente humillación pública, Leann y Gaby deciden divertirse al impartir un poco de lo que ellas mismas se vieron forzadas a pasar esa mañana, con todas las mujeres que laboran en la corporación farmacéutica.
Ahora que su naturaleza ha sido alterada, ellas desean alimentarse con la vergüenza provocada a todos aquellos que tengan a mal, atravesarse en su camino.
Esta es la segunda parte de; Seducidas por el poder corporativo.